Detrás de
la cortina de lágrimas, hay una sonrisa de mujer
En su
hemisferio derecho se oculta su alma
No sabemos
de qué se disfraza. Si de reina, de vedette, o de modelo.
Está jugando. Y es lo que mejor sabe hacer.
Porque sabe
que ese es el secreto y lo confió a tres generaciones.
También sabemos
por su sonrisa que hoy sigue jugando
Si no nos salva el humor entonces, entonces que
nos salve el amor.